Procrastinar

Mostrando entradas con la etiqueta SOLTAR. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta SOLTAR. Mostrar todas las entradas

Cositas que quiero recordarte:


Cositas que quiero recordarte:
Hace más daño lo que imaginas, que lo que realmente pasa.
Lo que sea que elijas, será lo correcto.
Somos fugaces con recuerdos eternos.
Se puede ser feliz y estar triste a la vez, y no pasa nada.
No fuerces ser importante en la vida de alguien.
Es hora de dejar de fingir.
Dilo, suéltalo y que pase lo que tenga que pasar.
Quédate donde tu corazón se sienta en casa.
Si te quiere ver, lo dice. Y al revés.
No hay tiempo para cosas sin alma.
Quiere lo que tienes antes de que la vida te enseñe a querer lo que perdiste.
Quédate cerca de las personas que te hagan bien al corazón.
Ten mala memoria para las cosas malas.
Nadie pierde por dar amor.

 LUCÍA HORMIGO

Se vale que ya no te guste lo mismo que antes...


Se vale que ya no te guste lo mismo que antes y que ya no quieras estar cerca a personas que los caminos han alejado. Se vale no aceptar cosas que antes defendías y aprobar ahora algunas que en algún momento atacaste. Se vale seguir evolucionando, abandonar creencias que ya no compartes y no estar donde no quieres, pues crecer implica tomar un camino propio y a veces soltar aquello que un día te dio la seguridad que ya no necesitas.

- Efren Martinez Ortiz

¿Por qué duele soltar lo insostenible?


No debería doler eso de perder alguien que nunca fue tuyo, pero es que cuando enfrentas tu realidad y sabes que debes asesinar las esperanzas que tenías de construir un "nosotros" mueres en ese justo momento. Y empieza a llover dentro de ti, tu alma se torna desolada, vacía, y las pobres cosquillas que sentías en el corazón se convierten en tristeza, olvidas cómo sonreír, vas llorando por dentro y sin ningún pañuelo que pueda secar esas lagrimas que se vuelven infinitas. ¿Por qué duele soltar lo insostenible?
Quizás porque conservaste la fé de ser "para siempre" y acabaron siendo "instantes".

- Luz Ramos

Las crisis de pánico: volcán en erupción


Las crisis de pánico suelen visitar a las personas acostumbradas a contener sus emociones. Después de varios años, esas emociones se acumulan, hasta el punto de estallar. Entonces, las personas que las padecen, que por lo general siempre han sido muy controladas y contenidas, sienten un súbito descontrol, inmenso e intenso, una falta de contención que las hace pensar que están locas o que se van a morir. Pero eso no pasa. Lo que pasa es que el cuerpo es sabio, y avisa. Avisa que ya llegó el momento de dejar de contener las emociones. Como un volcán en erupción, la rabia y la pena, que han dormido en silencio por años, irrumpen en el cuerpo en forma de angustia. Las crisis de pánico son un estallido emocional y una oportunidad para comprender que las emociones no son peligrosas. Que lo peligroso es, justamente, contenerlas.

Sebastián León, Psicoterapia relacional y crianza respetuosa.

Y es que yo no me solté...


Y es que yo no me solté, sólo me di cuenta que tú no me sostenías.

♪ ♫ ♩ ♬
Tú me dejaste de querer
Cuando menos lo esperaba
Cuando más te quería 
Se te fueron las ganas 

Hiciste lo mejor que pudiste. No tenías otra opción.


Hiciste lo mejor que pudiste. 
Hiciste todo lo que podías haber hecho. 
No tenías otra opción. 

Teniendo en cuenta lo que creías en ese momento, los poderosos o sutiles sentimientos que se movían en ti, lo conectado que estabas con tu respiración, tu cuerpo, tu verdad, tu camino; lo arraigado que estabas en el momento presente, la claridad con la que veías o no; de acuerdo al dolor que sentías, a lo abiertas y crudas que estaban tus heridas; considerando la resistencia que sentías, lo estrecha o amplia que era tu perspectiva, lo atrapado que estabas en tu historia personal, no pudiste haber actuado o dicho nada de otra manera. 

Hiciste lo mejor que pudiste, dado el nivel de consciencia desde el que estabas actuando. 

¿Es esto una excusa? No. Más bien se trata de que asumas la plena responsabilidad de lo que pasó. Sin embargo, soltando la culpa, 'renunciando a la esperanza de un mejor pasado.'

¿Es esto una salida fácil? No. Más bien se trata de que te perdones a ti mismo. Soltando 'lo que pudo o debió haber sido', alineándote con 'lo que es,' arraigándote en el Ahora, el único lugar desde donde puede surgir el verdadero cambio, donde las nuevas respuestas pueden emerger, donde el sanar puede comenzar. 

Laméntate por tu pasado, por supuesto. 
Aprende tus lecciones, por supuesto. 
Escucha cómo los demás comparten su dolor. Siente todo profundamente. Corrige todo lo que puedas. Pide perdón, si es necesario.

Pero, ni por un momento pienses que el pasado pudo haber sido diferente.

Ni por un instante creas que el Universo se ha equivocado.

Estás donde estás, Ahora. Este es un nuevo día, un nuevo comienzo. 

Armado con una nueva visión, con una nueva perspectiva, con un corazón mucho más humilde y compasivo, con una actitud más curiosa, muévete hacia el futuro, arraigado en esta amorosa presencia, abierto a las posibilidades. 

- Jeff Foster

No te aferres al pasado ni a los recuerdos tristes. ¡Lo que pasó, pasó!


No te aferres al pasado ni a los recuerdos tristes.
No reabras la herida que ya cicatrizó.
No revivas los dolores y sufrimientos antiguos.
¡Lo que pasó, pasó!
De ahora en adelante, pon tus fuerzas en construir una vida nueva,
orientada hacia lo alto, y camina de frente, sin mirar atrás.
Haz como el sol que nace cada día, sin pensar en la noche que pasó.

- C. Pastorino Torres, Minutos de Sabiduría

Por eso es tan importante dejar que ciertas cosas se vayan. Soltar. Desprenderse.


Por eso es tan importante dejar que ciertas cosas se vayan. Soltar. Desprenderse. La gente tiene que entender que nadie está jugando con cartas marcadas, a veces ganamos y a veces perdemos. No esperes que te devuelvan algo, no esperes que reconozcan tu esfuerzo, que descubran tu genio, que entiendan tu amor. Cerrando ciclos. No por orgullo, por incapacidad o por soberbia, sino porque simplemente aquello no encaja en tu vida. Cierra la puerta, cambia el disco, limpia la casa, sacude el polvo. Deja de ser quien eras, y transfórmate en quien eres.

- Paulo Coelho, Fragmento El Zahir 

Mejor no tenerla...