Más allá de la concepción religiosa, esta figura es el personaje más importante de la historia occidental por una obra que, en forma sencilla, se puede resumir en el generar una teoría del amor.
Su vida puede resumir, desde el nacimiento hasta su presencia en el mundo actual, en el cual es el principal ejemplo para millones de seres humanos, bajo una estimulación a que todo ser humano, en plenitud de conciencia, genere acciones de acercamiento a quienes ama pero que, de la misma forma, los acepte tal como son y, sobre todo, los mejore cada vez que pueda. Esta es la filosofía que nació, creció y ha crecido y desarrollado a lo largo de todo este tiempo que, de tomar cuatro generaciones por siglo, nos dan una cifra de ochenta pasos que ya constituyen una historia muy sólida.
Jesús es quien pone en la mente de los seres humanos el poder que puede crecer, mantenerse, recuperarse, incrementarse y optimizarse a través del establecimiento de esa corriente que naciendo de la emoción, contrae lazos importantes con la razón, generando sentimientos profundos y con la conducta, estableciendo las pasiones intensas. El amor, para Jesús, es compromiso de sentimientos y pasiones, de emociones alimentadas con la razón y la conducta.
La humanidad se transformó luego de la presencia como persona o como ficción, como leyenda o como verdadera historia de un hombre que expresó la necesidad que tenemos de esa emoción compleja y comprometida que tiene tres ingredientes básicos,
.- Acercamiento. En toda la doctrina que hizo a través de su apostolado, el ser humano debe buscar estar lo más cerca posible de los otros seres humanos sin que realmente importaran las grandes diferencias que pudieran darse y evidenciarse en todo intercambio y convivencia. Para lograr este acercamiento hay que estar concientes de muchas realidades y, sobre todo, de valorar más las conveniencias de la integración que la que puede dar la segregación.
.- Aceptación. En todo el pensamiento de este hombre, se encuentra la validez que tiene la aceptación que proviene de la flexibilidad (capacidad para aceptar las fallas en las expectativas que tenemos) y que genera como consecuencia evidente, la tolerancia que sería la capacidad de compartir (y de amar) a quienes, en forma prejuiciada o parcial, muestran importantes diferencias en lo que piensan, sienten o hacen o, en forma más profunda, en lo que son.
.- Mejoramiento. A lo largo de todo lo que nos han dicho del pensamiento de este hombre extraordinario, encontramos, la realidad vital del mejorar en lo que se pueda y, a través del compromiso, la existencia del otro ser humano o de los grupos que llega a conformar por cualquier característica. Lo importante, muchas veces, para bien amar en forma concreta, se encuentra –de manera muy simple-, en el saber detectar las realidades que deben ser mejoradas en el otro así como el también estar capacitado para hacerlo en la forma más conveniente.
Con esta guía del amor que se sacan de las enseñanzas de este hombre que nació aproximadamente hace 80 generaciones, se puede establecer dónde se encuentra el poder del amor así como también, dónde se encuentran las acciones que lo dañan con mayor eficacia y que, pueden estar en el alejamiento, el rechazo y el desmejoramiento que hagamos de alguien, ya sea una persona o todo un grupo. Todo el que haga alguna de estas acciones está en contra del pensamiento más puro y genuino de Jesús de Nazareth.
- Roberto De Vries
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